La historia de la torta se relaciona con las leyendas marianas de inundaciones. Se dice que la Sagrada Familia pasaba por la zona de O Boedo buscando refugio y alimento. A su paso, las puertas de las casas se cerraban y nadie les daba cobijo hasta que llegaron al hogar de la familia más humilde del pueblo. Esta no contaba con muchos recursos pero aún así aceptaron acogerles.

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Cuando la Sagrada Familia entró en la sencilla morada, los anfitriones le avisaron de la falta de alimento, a lo que José les respondió pidiéndoles que prepararan una torta con las cenizas de la chimenea, las cuales por la mañana se convertirían en una torta de maíz tan cierta como que todo el pueblo sería inundado. Y así fue. Por la mañana, la torta de ceniza  era una torta de maíz y todo el lugar quedó sumergido, salvo la casa de la familia que les abrió sus puertas.